En libros populares, fascículos coleccionables y otros medios es muy habitual ver escalas de velocidad en las que se compara las estimaciones de velocidad media o máxima de varios dinosaurios junto a las velocidades conocidas de varios vertebrados actuales.
Desde el origen de la Dinosaur Renaissance (la histórica, no este blog) las estimaciones de velocidad de muchos dinosaurios han llegado a extremos exagerados, tanto por lo conservador como por lo disparatado de lo biomecánicamente imposible (por ejemplo, en Tyrannosaurus rex se han llegado a estimar de los 11 km/h a casi 72 km/h como velocidades máximas).
Una típica escala de velocidades. Atención a la velocidad del humano... |
Pero pasemos a la cuestión divulgativa interesante. Independientemente de si las estimaciones de velocidad son demasiado exageradas o conservadoras lo que nos interesa es uno de los puntos claves de la Dinosaur Renaissance: ¿eran lentos los dinosaurios?
La pregunta tiene una pequeña trampa, claro. Rápido y lento no son términos absolutos, sino relativos. Una hormiga no puede correr tan rápido como un humano porque este es monstruosamente gigantesco a su lado y avanza en un segundo la distancia que ella avanzaría en unos cuantos segundos. ¿Es lenta la hormiga? No. ¿Recorre la misma distancia que un humano en el mismo tiempo? En absoluto, pero es una cuestión de escalas.
Este pueril ejercicio de reducción al absurdo lo quería usar para sentar las bases de lo que deberíamos usar como "rápido" y "lento" (asi como de otros términos comparativos como "pequeño" o "grande", "viejo" y "moderno", muy populares en la divulgación de los dinosaurios): UN ANIMAL ES RÁPIDO SI SE DESPLAZA A MAYOR VELOCIDAD QUE UN SER HUMANO MEDIO Y ES MÁS LENTO SI SE DESPLAZA A MENOR VELOCIDAD.
Otra escala de velocidad, de nuevo con un humano muy veloz... |
Fijémonos en las imágenes que acompañan al post. No dan una estimación en intervalo de la velocidad, sino que fijan una única velocidad, que se corresponde con la máxima estimación. Un dato curioso es la posición que el Homo sapiens (el ser humano) ocupa en esas escalas. Velocidades de 30 y 40 kilometros por hora como la media de nuestra especie, cerquita de las velocidades máximas estimadas para muchos (pero no todos) dinosaurios terópodos (los campeones de velocidad dentro de los dinosaurios, tanto actuales (avestruces) como fósiles (ornitomimosaurios)).
La realidad es que esas velocidades de 30 y 40 kilómetros por hora para seres humanos son los records de deportistas de distintas áreas (la máxima, la de Usain Bolt, más de 40 km/h), correspondientes por tanto a sucesos concretos registrados, y no a una estimación máxima de la mayor parte de la humanidad, la cual apenas excedería los 15 km/h (y contando que corremos con zapatillas deportivas acolchadas y sobre asfalto, que habría que vernos descalzos por el monte pedregoso...).
El objetivo del post era demostrar, ni mas ni menos, que una velocidad media de 20 o 25 km/h para un tiranosaurio de 6 a 8 toneladas no es en absoluto "lento". Queda lejos de esos (fantásticos, por otro lado) 70 km/h de un tiranosaurio de 4 toneladas, pero cualquier ser humano normalito sudaría para alcanzarle (y no hablemos de correr a la par o pasarle de largo).
Por lo que no nos dejemos engañar por esas escalas: muchos dinosaurios eran más veloces que nosotros, otros corrían a velocidades parecidas y otros eran más lentos que nosotros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario