lunes, 16 de febrero de 2015

Reseña de "The Paleoart of Julius Csotonyi"

Ya lo dijimos: pronto caerían más reseñas. Y como lo prometido es deuda, y en Dinosaur Renaissance somos gente de palabra, hoy os traemos una nueva crítica. ¿Queréis saber qué nos ha parecido "The Paleoart of Julius Csotonyi"? ¡Pues vamos allá!


"The Paleoart of Julius Csotonyi. Dinosaurs, sabre-tooths and beyond" es un libro que salió a la venta en mayo del año pasado (como ya comentamos aquí). Este libro ha sido editado por Titan Books, la misma editorial que ya nos trajo "Dinosaur Art: The World's Greatest Paleoart" en 2012. Precisamente como consecuencia del contacto entre Steve White, editor de este último, con Julius Csotonyi (cuyas obras venían incluidas en el volumen), surgió la idea de hacer un libro recopilatorio con su trabajo. Por si alguno no sabéis todavía de quién hablamos, Csotonyi es un científico y paleoilustrador canadiense de raíces húngaras nacidos en 1973, y uno de los paleoartistas más en forma de los últimos años (podéis leer más aquí sobre él en esta entrada de El Cuaderno de Godzillin).


Como comentaba en la primera entrada que hicimos sobre este libro, no sabía muy bien qué esperar sobre él, ni cómo estaría organizado. ¿Quizás un catálogo de sus ilustraciones en alta calidad? Pues bien, "The Paleoart of Julius Csotonyi" es exactamente eso: un recopilatorio (¡un enorme recopilatorio!) de las obras de este artista. Es decir, es un maravilloso tomo lleno de imágenes a todo color  y a toda página, doble página, ¡e incluso triple o cuádruple página! (recordemos que Csotonyi ha hecho varios grandes murales para distintas exposiciones, y meter eso en una sola hoja es imposible). Cada una de las obras viene con un pequeño pie de figura, en el que se refieren los organismos representados, el año y la técnica utilizada. Algunas de las ilustraciones, además, vienen con un pequeño cuadro de texto escrito por el paleontólogo de turno que describió tal o cual taxón, donde hablan de ese trabajo concreto de Csotonyi.


El libro presenta un pequeño prefacio del Dr. David C. Evans, conservador del Vertebrate Paleontology Royal Ontario Museum, y después un texto del famoso Dr. Robert Bakker, en el que habla de la colaboración con Csotonyi a la hora de ilustrar los descubrimientos hechos en un yacimiento de Dimetrodon en Texas. Este breve capítulo (si es que puede llamarse así) me pareció de lo más interesante: resulta increíble leer la descripción que hace Bakker del yacimiento, la disposición de los distintos niveles y de los distintos restos de organismos allí encontrados, y de toda la información que pudieron extraer de ellos, para a continuación, encontrarte en las dos siguientes páginas una magnífica fotocomposición de Csotonyi que plasma todos los descubrimientos previamente descritos por Bakker.


Después de esta pequeña introducción, viene una entrevista entre White y Csontoyi. En ella se abordan los típicos temas: desde cuándo dibuja y de dónde le viene esa afición, sus influencias, su manera de aproximarse y trabajar con una ilustración... lo habitual. Sin embargo, de estas diez páginas de entrevista también se extrae otra información menos habitual y más curiosa, como el hecho de que Csotonyi está bien concienciado y comprometido con la lucha contra el creacionismo y con cómo la ilustración puede tener una gran importancia a la hora de divulgar ciencia, o, por ejemplo, que tiene también una pequeña colección privada de dibujos sobre biología especulativa (ya sabéis: vida en otros planetas, evolución de la vida en la Tierra en el futuro... ¡Me encantaría que esos dibujos suyos salieran a la luz alguna vez!).

Y tras esta entrevista... llegamos al grueso del libro, que son docenas y docenas de páginas llenas de ilustraciones divididas en tres bloques: Paleozoico, Mesozoico y Cenozoico. Toda una enorme variedad de fotocomposiciones (que me gustan algo menos, he de reconocerlo) y de pinturas digitales (las cuales me gustan más) pasan ante nuestros ojos. Hay, además, un par de trabajos sobre los que Csotonyi se para y te explica todo el proceso creativo que le llevó al resultado final que vemos en el libro. Una de estas ilustraciones "especiales" es la imagen del apatosaurio que os muestramos justo aquí debajo. Es increíble ver la calidad y el nivel de detalle que hay en sus obras (cuando te fijas con detalle, la piel elefantiana del Apatosaurus está cubierta de cientos y cientos de pequeñitas escamas).


Poco más que añadir. Aunque la mayoría de las ilustraciones vienen en la propia web de Csotonyi o pueden encontrarse por internet, la oportunidad de verlas en papel impreso y recrearse durante un buen rato con ellas no tiene precio. Permite apreciar también la evolución en el trabajo de este artistazo, ya que, si bien sus primeros trabajos (en torno a 2007) eran ya muy buenos, lo que hace hoy en día está a un nivel que muy pocos pueden lograr. Os animo encarecidamente a que os hagáis con él.

P.D.- "Pterosaurs", de Mark Witton, anda ya también en mi poder, pero puesto que es todo un tratado sobre pterosaurios, leerlo y hacer una reseña llevará su tiempo.

lunes, 2 de febrero de 2015

Detalles de Concavenator en Jurassic World!

ATENCIÓN: SPOILERS. Este post contiene algunos detalles sobre la trama de Jurassic World, que no se estrenará hasta el 12 de Junio. Si no quieres que se te destripen algunos detalles sobre el diseño de esta criatura, no sigas leyendo.

Hace unos pocos días se filtró, a través del merchandising, el aspecto del dinosaurio híbrido llamado Indominus rex que será uno de los pilares fundamentales de la trama de Jurassic World, la esperada cuarta parte de la saga de Parque Jurásico. Aunque el híbrido es un aspecto de la trama que no me hace especial ilusión, su diseño merece ser comentado.

Pese a ser un híbrido y haber podido tener infinitas licencias para su diseño, se ha optado por un diseño de terópodo clásico, sin detalles muy llamativos en el cráneo pero con algunos muy curiosos en el cuerpo. Ahora que se ha revelado que oficialmente es un híbrido entre un abelisaurio y un carcaradontosaurio (cosillas que ya quedaban muy evidentes en el diseño que se filtró) esta apariencia conservadora queda un poco mejor justificada y personalmente me gusta más.

La primera imagen oficial hecha pública de Indominus rex.

Estábamos hablando del diseño tranquilamente en la Unidad de Paleontología cuando Elena Cuesta,  paleontóloga que estudia el carcaradontosaurio manchego Concavenator corcovatus, se percató de que el diseño incorporaba en los antebrazos una especie de modificación del tegumento filamentosa que no eran unas plumas... ¡Anda! ¡Pero si eran súper parecidas a las hipotéticas estructuras postuladas para Concavenator en la publicación original!

(Para los despistados o recién llegados, en 2010 se publicó en la revista Nature Concavenator y se encontraron unos pequeños bultos en la ulna, que parecían idénticos a los hallados en Velociraptor e identificados como homólogos a los bultos que dejan las plumas remeras en aves, y ello implicaría que Concavenator bien podría haber presentado )

Efectivamente, parece que la hipótesis de estructuras similares a plumas en el antebrazo de algunos terópodos ha llegado hasta Hollywood y se ha empleado en el diseño de una película. Esto, no obstante, es un arma de doble filo (como ya comentaremos más adelante, que no queremos spoilear eso tampoco) pero es una gran noticia que esta hipótesis adquiera tamaña difusión a través de una película con su merchandising y todo.

Segunda imagen oficial hecha pública del Indominus rex, en la que se aprecian sus dientes cocodrilianos.

Pero bueno, hablemos de otros de los rasgos de este "dinosaurio" que podemos apreciar en las imágenes filtradas y la información hecha pública. En la web oficial de Jurassic World se hace hincapié en las escamas engrosadas que presenta en la piel (y que en la web llaman osteodermos, explicando que son escamas engrosadas que tienen un hueso debajo), haciendo mención a que tienen su origen en los abelisaurios.

Bien, efectivamente se conocen impresiones de piel de abelisaurios (concretamente Carnotaurus sastrei) y sí, tienen tubérculos aquillados de 4 a 5 centímetros separados regularmente entre ellos cada 10 centímetros. La única pequeña nota, es que son escamas engrosadas, pero no osteodermos (al menos no se conoce evidencia de que existieran osificaciones dérmicas debajo de estas escalas). No obstante, el cercanamente emparentado Ceratosaurus sí que poseía una fila sagital impar de osteodermos, por lo que su presencia en un abelisaurio no es imposible, pero aún no existe la evidencia que lo demuestre.

Algunos de los rasgos llamativos del Indominus rex. La imagen está modificada del merchandising filtrado.  
Por último (y me he dejado lo malo para el final) están los dientes. En todas las imágenes disponibles del I. rex se aprecia una dentición claramente festoneada, de aspecto totalmente cocodriliano. Aunque sabemos que los cocodrilos son parientes próximos a los dinosaurios, ningún dinosaurio presenta festoneado en los alveolos dentarios (ni siquiera los que se parecen superficialmente a los cocodrilos, como Spinosaurus y parientes), por lo que a menos que en la trama de la película se justifique con DNA de cocodrilo como causa de esta dentición, existe un fallo bastante serio.

No es la primera vez, por cierto, que un diseño oficial de Jurassic Park presenta un terópodo con dentición de cocodrilo. Ya nos quejábamos de ello en este post, acerca del poster de Jurassic Park 3D. Es algo que también se hizo en el King Kong de Peter Jackson, y que desde el punto de vista del diseño tiene mucho sentido: una dentición "desordenada" y con festoneado da un aspecto mucho más monstruoso a su portador. Pero ello va algo en contra de lo que era el espíritu original de Jurassic Park en 1993.

En definitiva: ¿cuál es mi opinión del Indominus rex? Una vez explicados los orígenes de su apariencia (no es un híbrido de raptor, Rex, sepia y demás como se había rumoreado) esta me parece bastante interesante. Si justifican el origen de este animal como un accidente (tenían genomas parciales y tuvieron que hacer el híbrido para crear el dinosaurio, crearon el monstruo y una vez creado lo quieren aprovechar para atraer el turismo) y no como una necesidad (que es lo que el trailer deja entender) me gustaría más. Pero, por el momento, vamos a esperar a que se estrene.

Mientras tanto, podemos disfrutar del segundo trailer/spot, que se estrenó ayer durante la SuperBowl:



Seguiremos informando :)

Entrada también publicada en El Cuaderno de Godzilin

PS: Ya hablaremos más adelante sobre esos 4 dedos del I. rex que se ven claramente en el nuevo spot, pero dejamos una pregunta en el aire: ¿mano primitiva, o dos pulgares?

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Más información: 

  • Bonaparte, J. F., Novas, F. E., & Coria, R. A. (1990). Carnotaurus sastrei Bonaparte, the horned, lightly built carnosaur from the Middle Cretaceous of Patagonia. Contrib. in sci./Natural history nuseum of Los Angeles county.
  • Czerkas, S. A., & Czerkas, S. J. (1997). The integument and life restoration of Carnotaurus. In Dinofest International, Proceedings of the Symposium at Arizona State University (pp. 155-158)
  • Ortega, F., Escaso, F., & Sanz, J. L. (2010). A bizarre, humped Carcharodontosauria (Theropoda) from the Lower Cretaceous of Spain. Nature467(7312), 203-206.